A nuestra vida

Todo en abrasiones y rasguños te sientas al pie del siguiente y luego decides sentarte sobre el moción en un puño para enrollar, regañar y ofenderte a quien supuestamente te puso un pie de pie en la montaña anterior y te caiste de allá. «No se parece a nuestra vida con sus altibajos (estallidos de sentimientos, emociones.